Frases de la película El cuento de la princesa Kaguya
Había una vez un cortador de bambú. Cortaba bambú en la montaña para hacer toda clase de cosas. Se llamaba Sanuki no Miyatsuko. Un día vio luz brillando desde un tallo de bambú. Maravillado, se acercó. ¿Un brote de bambú creciendo antes de las flores del ciruelo?
- ¿Qué es esto? ¿Puedo preguntar quién es usted? ¡Qué princesa tan hermosa! El cielo debe habérmela enviado como una bendición.- ¡Está creciendo rápido! ¡Como un brote de bambú!
- ¡Esa es ella! ¡Pequeña bambú!
- ¡Pequeña bambú!
- ¡Pequeña bambú!
- ¡Pequeña bambú!
- ¡Pequeña bambú!
- ¡Ella no es pequeña bambú! ¡Ella es una princesa!"Pájaros, insectos, bestias
Pasto, árboles, flores
Enséñenme cómo sentir
Si escucho que ustedes me añoran
Regresaré a ustedes"- Esa es una canción extraña.
- ¡Está llorando! ¡Sí!
- ¿Qué pasa?
- No lo sé.- Cuando estos hermosos ropajes salieron volando, supe lo que El Cielo desea.
- ¿Lo que El Cielo desea?
- Quiere que le demos una vida que vaya acorde con estas ropas. Que la hagamos una princesa noble.
- ¿Una princesa noble?
- Con este oro, le construiré una fina mansión en la capital.
- ¿Llevárnosla allá?
- Sí. Aquí sólo será siempre una campesina. Viviendo con nobles como una princesa real será feliz. En todo caso, eso es lo que desea El Cielo.- De alguna manera tengo el sentimiento de que seguirás creciendo y te marcharás a algún lugar muy lejos de aquí.
- ¿Porqué dices eso? Siempre estaré aquí contigo, por siempre y para siempre. Siempre seré una más de tu pandilla.- Sutemaru atrapó un faisán. ¡Y encontramos hongos y uvas! ¿A dónde van?
- A la capital.
- ¿La capital? ¿Yo también? ¿Ahora?
- Sí. Deja ahí esa canasta.
- Pero le dije a Sutemaru que todos comeríamos estofado de faisán.
- Déjalo. Vámonos.
- ¿Volveremos a tiempo para el estofado mañana?Pero para la princesa y Sutemaru, ese mañana nunca vino.
- Una princesa noble no retoza y baila por todos lados de esa manera.
- Su Majestad, he convocado a Lady Sagami desde el Palacio para que te enseñe los modales de una princesa noble.
- ¿Una princesa noble? ¿Palacio?
- Nunca había conocido una niña que necesitara tanto de mi instrucción. La convertiré en una dama verdaderamente refinada.Y así con Lady Sagami la princesa empezó a aprender los nobles aires y gracias de una dama.
- Conmigo, trata todo como si fuera un juego. Pero luego, instantáneamente hace todo perfectamente.
- Eso tiene sentido. Verdaderamente es una princesa celestial.- ¡No! ¡Nunca!
- Nunca serás una princesa noble con ese aspecto.
- ¡Se me meterá sudor en los ojos si me sacas las cejas!
- Una princesa noble no suda. Ahora...
- ¡Y los dientes ennegrecidos se ven raros! ¿Cómo voy a sonreír?
- Una princesa noble no abre su boca y ríe.
- ¡Eso es estúpido! ¡Incluso una princesa debe sudar y reírse en voz alta a veces! O tener ganas de llorar. ¡O enojarse y gritar!
- No. Una princesa noble...
- ¡Entonces una princesa noble no es humana!- "La Princesa Centelleante del Flexible Bambú" "La Princesa...¿Kaguya?" Sí. Una figura tan grácil como el esbelto bambú y una belleza que brilla desde dentro de ella. Le otorgo un nombre que significa: "Luz brillante" por esto sugiero "Princesa Kaguya".
- ¡Princesa Kaguya! Lord Akita, ha dado usted un nombre verdaderamente fino.- No es una verdadera princesa.
- ¡Ella es una princesa!
- ¿Cuánto te costó hacer que la nombraran? ¡Por lo menos déjanos verla! ¡Tal vez es fea!- ¿Sabe usted qué les pasó a las personas que vivían ahí abajo?
- No sabría decirte. Están en un viaje buscando buenos árboles.
- ¿Un viaje?
- No volverán en diez años.
- ¿Diez años?
- Usa todos los árboles y matas la montaña. Deja su poder y vete y revive. Dales diez años a los árboles, y puedes trabajarlos de nuevo. Con el carbón es igual.
- ¿Pero y si la montaña está verdaderamente muerta? Las hojas eran tan hermosas...
- No está muerta.- Puede que sea hermosa, pero es de humilde cuna. No es mujer para ninguno de noosotros.
- "Princesa Kaguya" es un nombre presuntuoso para la hija de un hombre como Miyatsuko.
- No Ministro, no es su verdadera hija. Ella nació de un brote de bambú.
- ¿De un brote de bambú? Qué interesante, ¿entonces es un espíritu del bosque?
- Eso no es completamente imposible, Lord Consejero.
- ¿¡Qué?!
- En el momento en el que estuve frente a ella mi cuerpo comenzó a temblar como si una fuente reseca reviviera, ¡el sólo recuerdo de su resplandeciente belleza me deja sin palabras!- ¡Cinco de los más nobles caballeros del reino han venido! ¡Y vestidos formalmente!
- ¡Oh...! ¡Gracias al Cielo! Un ministro, dos príncipes...¿cómo elegirá entre ellos?- No puede equivocarse con ninguno de ellos. Así que, Su Majestad, elija al que desee.
- ¿Aunque no los conozca?
- Por supuesto. Un caballero hace su propuesta y se conocen el día de la boda. ¡Con su elección de cualquiera de estos cinco nobles será usted muy feliz!
- ¿"Feliz"? No deseo casarme con nadie aún.
- ¡No puede decir eso en serio! Debe casarse con un caballero apropiado lo más pronto posible. Eso es la felicidad misma. ¿Porqué duda? Con cualquiera de esos hombres, su felicidad queda asegurada.
- ¡No elegiré a ninguno de ellos! Por favor dígales que se vayan.
- ¿Desea usted herir a su padre?Estoy agradecida por estos sentimientos hacia alguien a quien no han conocido ni visto siquiera. Les pido que me traigan estos raros tesoros de los que me hablan. Entonces podré sentir claramente en mi corazón cómo me atesoran.
- Es mi culpa que todos sean miserables.
- No es tu culpa. No lo es.
- Es mi culpa. ¡Porque soy una farsante!
- ¡Princesa!
- ¡Nunca soñé que las cosas terminarían así!- ¡Su Majestad te convoca a servirlo en la corte! ¡Serás una de sus damas! ¡Y yo podré ponerme un tocado de cortesano! ¡Gracias al Cielo!
- ¿Aún no entiendes cómo se siente? ¡No lo entiendes!
- ¡Esto es para lo que he trabajado! ¡Una dama de la corte! ¡No hay mayor felicidad para una chica en el reino! ¡Por fin la princesa será feliz!
- Padre, lo siento, pero por favor rehúsa. No puedo ser de Su Majestad ahora.
- ¿Qué? Esto es por tu bien...
- Dile que no.
- ¡Pero nadie en esta tierra puede desobedecer una orden de Su Majestad! Ahora, por favor, no lleves la contraria.
- Si deseas acusarme de desobediencia hacia Su Majestad siéntete libre de matarme.
- ¡Princesa!
- Si tu felicidad depende del tocado de un cortesano entonces iré con él. Cuando te vea con ese tocado me mataré.Nunca soñé que una mujer me rechazaría. Fascinante, ahora quiero conocerla aún más.
- Ven conmigo al Palacio.
- ¿Porqué estás haciendo esto?
- Ninguna mujer es infeliz cuando lo hago.
- ¡Nunca seré suya!
- Lo serás, si es mi deseo.- Te sientas todas las noches a mirar la luna. ¿Qué sucede?
- Nada.
- Hay algo.
- Puedo saberlo por tu mirada.
- En realidad nada está mal.
- Eso no es verdad. ¿No puedes decirme siquiera a mí?
- ¡No quiero volver a la luna!
- ¿"volver"? ¿"A la luna"?
- ¡Les he suplicado que me dejen quedarme! ¡Aquí, en esta tierra! ¡Pero vendrán por mi la noche del quince!
- ¿Vendrán por ti? No lo entiendo.
- Su Majestad, dígame algo que tenga sentido. Oh, pobrecita, esto es serio.
- Yo soy alguien que fue enviado aquí desde la luna.
- ¡¿La luna?! ¡Entonces eso era!
- Sí. Me di cuenta cuando vino Su Majestad. Y ahora en el quince debo dejarlos y volver.- ¿Qué hemos hecho para merecer esto? Todo lo que hemos hecho ha sido para tu felicidad.
- La felicidad que desearon para mí fue difícil de soportar. Sin darme cuenta recé a la luna para que me salvara. Cuando Su Majestad me abrazó, mi corazón gritó "¡No quiero estar aquí!"- Pero ahora que debo irme finalmente recuerdo porqué bajé a este lugar y para qué. En esta extraña tierra siempre he sabido esa canción: "Pájaros, insectos, bestias..." Así es. ¡Nací para vivir verdaderamente! ¡Justo como las aves y las bestias! ¡No quiero marcharme!
- ¿Crees que te dejaremos ir? ¡Desde el día que te tomé de ese brote de bambú te he amado como si fueras mi única hija!
- ¡Cuando te cargué, te cambié, te puse sobre tus pies yo era tan feliz como si estuviera en el cielo!
- ¡No es demasiado tarde! ¡Aún estás aquí! ¡Aquí entre mis brazos!Cuando te pongas el ropaje de la Luna, perderás todo recuerdo de aquí. Toda la pena y la tristeza se irán.
- ¿Sutemaru? ¿Eres tú?
- ¿Pequeña bambú? ¿Puedo llamarte así? Estamos apenas regresando aquí. Al pasar creí escucharte cantar. ¡Estoy tan feliz de verte! ¿Pero porqué estás aquí y vestida así?
- Todo este tiempo he querido regresar a casa.
- ¿"Casa"? ¿Aquí?
- Sí.
- ¿No te gustó la capital? Tenías buenas ropas, una mansión, fina comida...
- Todo el tiempo estaba pensando en cómo solíamos jugar aqui.
- Todos estarán aquí pronto.
- Contigo Sutemaru... contigo, Sutemaru, puede que hubiera podido ser feliz.
- ¿Conmigo?
- Ahora me doy cuenta de ello.- Escapemos. ¡Ahora mismo! Te cargaré en mi espalda. Nos iremos muy lejos, donde nadie nos conozca.
- No puedo escapar ahora.
- ¡Seguro que puedes! ¡Si nos encuentran, te protegeré!
- Ya me encontraron.
- ¿Qué quieres decir?
- He sido encontrada.- ¡Mamá! ¡Papá!
- ¡Princesa! ¡Llévanos contigo!
- ¡Papá, mamá, perdónenme!
- Ven, en la pureza de la Ciudad de la Luna deja atrás las tristezas e impurezas de este mundo.
- ¡No es impuro! ¡Hay felicidad! ¡Hay pena! ¡Todos los que viven aquí las viven de diferentes maneras! ¡Hay aves, insectos, bestias, pasto, árboles , flores y sentimientos!
- ¡Princesa! ¡Princesa! ¡Princesa!
- ¡Perdónenme!