Frases de la película Noches Púrpuras (My Blueberry Nights)
¿Sabes? bueno, dime qué le gusta comer. Porque recuerdo a la gente por lo que pide, no por sus nombres.
Si tiro esas llaves esas puertas quedarían cerradas para siempre. Y no debo ser yo quien decida eso.
- Al final de cada noche la tarta de queso y el pastel de manzana siempre se acaban. La torta de durazno y la torta de mousse de chocolate están casi terminadas. Pero siempre queda una tarta de arándanos sin tocar. "¿Y qué hay de malo en la tarta de arándanos?
- No tiene nada de malo. Sólo que la gente elige otras cosas. No puedes culpar a la tarta de arándanos. Simplemente nadie la quiere.O quizás uno de ellos se fue con otra persona. Quizás se fueron los sentimientos.
Por desgracia, a ella le gustaban más los atardeceres que las llaves y terminó desapareciendo en uno.
- Cuando era pequeño mi madre solía llevarme al parque los fines de semana. Ella decía que si alguna vez llegaba a perderme tenía que quedarme en un lugar así ella podía encontrarme.
- ¿Eso funciona?
- En realidad, no. Ella se perdió al salir a buscarme.Algunas noches, vuelvo a mirar las cintas y me asombro sobre lo mucho que me he perdido. Eso que está pasando justo enfrente de mí.
¿Cómo le dices adiós a alguien que no te imaginas poder vivir sin él?
Tener dos trabajos es agotador. Pero al menos me mantiene ocupada y lo más importante, mantiene mi mente lejos de él.
Yo estoy contento de no tener un gemelo. Conmigo alcanza.
No tengo en mente ningún destino específico, pero voy a viajar hasta que no me queden lugares por visitar.
¿Ves todas esas fichas blancas, Lizzie? Soy el rey de la ficha blanca.
Si fuera una adicta, escogería el pastel de arándonos como mi ficha de sobriedad.
- ¿Por qué no lo llamas?
- Algunas cosas quedan mejor en papel.Nadie dijo que acostarse con la esposa de alguien más era una vocación segura.
No necesitas un empleo con todos esos novios tuyos. Todo lo que necesitas hacer es empezar a cobrar.
Pues, esto sabe bastante horrible. Pero supongo que nadie lo toma por el sabor, ¿verdad?
No lo odiaba. Sólo quería que me dejara ir. Y ahora que lo ha hecho me duele más que cualquier otra cosa en el mundo.
Cuando mueres, todo lo que dejas son los recuerdos que creaste en la vida de las otras personas. O un par de ítems en un recibo.
Siempre tuve la sensación de que podía contarte cualquier cosa.
Me pregunto cómo me recuerdas. ¿Como la chica a la que le gustaba la tarta de arándanos? ¿O la chica del corazón roto?
Es una lástima que ya no se pueda fumar en los cafés. Ya no se puede fumar en ningún lugar.
Aunque la puerta esté abierta puede que la persona que busques no esté allí, Katya.
Hace unos años tuve un sueño. Comenzaba en el verano y terminaba en la primavera siguiente. En el medio, había tantas noches tristes como días felices. La mayoría de ellos transcurrían en este café. Y entonces, una noche se cerró una puerta y el sueño se terminó.
Siempre me fascinaron los jugadores de cartas. Arriesgan todo a sus instintos y a su suerte.
Puedes ser tacaño o afortunado. Pero no puedes ser ambas cosas. No por mucho tiempo.
Trabajar tantas horas en el casino te hace perder la noción del tiempo. Y nunca sé realmente si es de día o de noche. Pero al menos no debo preocuparme de mi problema de insomnio.
¿Cuánto te queda, dulzura? Porque eso es lo que voy a apostar.
¿Por qué no puedes adelantarme el efectivo y te devolveré el dinero dentro de las 24 horas? Ni siquiera vas a tener la oportunidad de extrañarlo.
- Pensé que estarías a mitad de camino de Las Vegas en tu Jaguar.
- Pensaba... ¿por qué no dejarte pagar la gasolina?No he tenido mucha suerte con los novios. He tenido unos pocos pero ninguno al que le pueda pedir algo alguna vez, olvídate de dinero.
Él solía decirle a las personas que yo pensaba que el número que venía después del diez era Sota.
Confía en todo el mundo, pero siempre corta la baraja. Lo mejor que mi papá me ha enseñado.
No puedes ganar siempre. Puedes vencer a los jugadores, pero no puedes vencer a la suerte.
- ¿Por qué confías en ellos?
- Porque no puedes ni siquiera confiar en ti.Tienes que dejar de hablar con las personas en sus términos.
A veces dependemos de las personas como un espejo para definirnos y decirnos quienes somos. Y cada reflejo me convierte en mí misma cada vez más.
- ¿No está reservado?
- Reservado para ti.Me llevó cerca de un año llegar aquí. No fue tan difícil cruzar esa calle, después de todo. Todo depende de quién te está esperando en el otro lado.