Frases de la película Maléfica
Contaremos una antigua historia de nuevo y veremos cuánto la conocen. Había una vez dos reinos que eran los peores vecinos. Sus desacuerdos eran tan grandes que se decía que solo un gran héroe o un villano terrible podría unirlos.
Robar no es correcto pero no asesinamos a la gente por eso.
El hierro quema a las hadas.
Maléfica pensó en cómo Stefan se despojó de su anillo él, quien tenía tan poco en el mundo para que sus manos pudieran unirse de nuevo y su corazón se conmovió. Así, el joven ladrón que esperaba robar una joya se robó algo más valioso.
Stefan y Maléfica, inesperadamente, se hicieron amigos. Y, por un tiempo, parecía que, al menos entre ellos
el viejo odio entre los hombres y las hadas se había olvidado. Como a veces sucede, la amistad se convirtió lentamente en otra cosa. Y en el decimosexto cumpleaños de Maléfica Stefan le dio un obsequio. Él le dijo que era un beso de amor. Pero no era cierto.- Un rey no acepta órdenes de un elfo alado.
- Tú no eres un rey para mí.Alas. Necesito que seas mis alas.
Debo decirlo. Realmente me sentí afligida por no haber recibido una invitación.
- Escuchen atentamente, todos ustedes. La princesa crecerá con belleza y gracia amada por todo aquel que la conozca. Es un precioso regalo.
- No hagas esto.
- Pero antes de que el sol se oculte, en su decimosexto cumpleaños se pinchará un dedo con la aguja de una rueca y caerá en un sueño de muerte. Un sueño del cual nunca podrá despertar.
- Maléfica, por favor, no hagas esto, te lo ruego.
- Me gusta que ruegues. Hazlo de nuevo.
- Te lo ruego.
- De acuerdo. La princesa podrá despertarse de su sueño mortal pero solamente con un beso de amor. ¡Esta maldición durará hasta el fin de los tiempos! Ningún poder en la Tierra podrá cambiarla.- Sé quién eres.
- ¿En serio?
- Eres mi Hada Madrina.
- ¿Qué?
- Hada Madrina. Me has cuidado toda la vida. Siempre supe que estabas cerca.
- ¿Cómo?
- Tu sombra. Me sigue desde que era pequeña. A donde fuera, tu sombra siempre estaba conmigo.- ¿Todas las hadas tienen alas?
- La mayoría, sí.
- ¿Y tú por qué no tienes? Todas las otras hadas vuelan.
- Yo tuve alas una vez. Me las robaron. Es todo lo que quiero decir al respecto.
- ¿De qué color eran? ¿Eran grandes?
- Tan grandes que se arrastraban cuando caminaba. Y eran fuertes. Podían llevarme sobre las nubes y contra el viento. Y nunca fallaron. Ni una sola vez. Podía confiar en ellas.- Hay algo que debo decirte.
- ¿Qué?
- Existe un mal en este mundo y no puedo alejarte de él.
- Pronto tendré 16, Madrina. Puedo cuidarme sola.
- Lo entiendo.
- Pero no es lo que tengo que decirte. Tengo un plan. Cuando sea mayor, viviré aquí en El Páramo, contigo. Y podremos cuidarnos mutuamente.
- No tienes que esperar a que seas mayor. Podrías vivir aquí ahora.
- ¡Entonces lo haré! Dormiré en un árbol y comeré bayas y nueces y seré amiga de todo el Bello Pueblo. Seré feliz aquí el resto de mi vida. Se lo diré a mis tías mañana.Han sido muy buenas conmigo excepto aquella vez que me dieron de comer arañas por accidente.
- Un beso de amor, ¿recuerdas? Eso puede romper el hechizo.
- ¿Un beso de amor? ¿Acaso no te diste cuenta? La maldije así porque el verdadero amor no existe.¿Eres tú? ¿Tú eres Maléfica? ¡No! No me toques. Tú eres el mal en este mundo.
- Mírenla. Miren lo que hicieron. Solo está durmiendo. ¿Dicen que solo está durmiendo? ¿Les parece?
- Solo está durmiendo.
- ¡Solo está durmiendo para siempre!
- ¿Y qué hay del beso? ¡Sí, un beso de amor!
- El amor no existe.- Es la muchacha más hermosa que he visto.
- ¿Quieres besarla?
- Mucho.
- Entonces, hazlo.
- No creo que sea correcto. Apenas la conozco. Solo la vi una vez.
- ¿No has oído hablar del amor a primera vista?
- ¡Bésala! Hazlo.
- ¿Está hechizada?
- ¡Bésala!....... ¡No lo hiciste bien! ¡Se supone que era un beso de amor!- No pediré que me perdones porque lo que te he hecho es imperdonable. Estaba tan perdida entre el odio y la venganza. Dulce Aurora te robaste lo que quedaba de mi corazón. Ahora te perdí para siempre. Juro que nadie te lastimará mientras yo viva. Y no pasará un solo día en el que no extrañe tu sonrisa.
- Hola, Madrina.
- Hola, bestia.¿Cómo se siente ser un hada sin alas en un mundo al que no perteneces?
Maléfica derribó su muro de espinas y se desprendió de la corona. Invitó a Aurora para que vea cómo había sido El Páramo mucho antes, cuando ella era solo una niña y era feliz. Ahora, lo era otra vez.
Como verán, la historia no es tal como la conocían y lo sé bien pues fue a mí a quien llamaron La Bella Durmiente. Al final, mi reino no fue unido por un héroe ni por un villano, como decía la leyenda sino por alguien que fue tanto un héroe como un villano. Y su nombre era Maléfica.