Frases de la película La novicia rebelde
La colinas cobran vida con el sonido de la música.
Siempre procuro conservar la fe en mis dudas, hermana. La lana de las ovejas negras también abriga.
¿Cómo se resuelve un problema como María? ¿Cómo se logra detener un rayo de luna en la mano?
Cuando el Señor cierra una puerta abre una ventana en otro lugar.
La fuerza no reside en los números como tampoco en la riqueza, pero sí en las noches de sueño apacible.
- Cámbiese de vestido antes de ver a los niños.
- ¿Y este vestido?
- No lo quisieron.iLo lamento señor! No responderé a un silbido. Así se llama a los animales,
no a los niños.Tengo dieciséis años, casi diecisiete. Soy inocente como una rosa. De solteros, guapos y bebedores de brandy. ¿Qué puedo saber yo de ellos?
Los niños von Trapp no juegan. Marchan.
Siempre que me siento triste, trato de pensar en cosas lindas.
Si me muerde un perro, me pica una abeja o me siento triste, simplemente recuerdo mis cosas preferidas y entonces no me siento tan mal.
Las notas son sólo las herramientas para crear una canción.
La actividad sugiere una vida llena de propósito.
- ¿Hay algo que no pueda hacer?
- Quizás, ser una buena monja.Los hombres no pueden resistirse a una mujer enamorada.
- Me encanta imaginarte como madre de siete chicos.
- ¿Cómo piensas hacerlo?
- Nunca has oído hablar de los encantadores internados?El amor de pareja también es santo. Tú tienes mucho amor que dar.
Este lugar no se hizo para eludir los problemas. Debes enfrentarlos.
Tienes que vivir la vida para la que naciste. Escala todas las montañas. Busca por doquier. Caminos sinuosos. Y cada senda que veas.
- Me pregunto cómo sabe el pasto.
- Me siento horrible.No puedes usar la escuela para eludir los problemas. Debes afrontarlos.
Es que uno no puede casarse con alguien cuando está enamorado de otra persona ¿o sí?
- ¿Sabes cuándo comencé a amarte?
- La noche en que te sentaste sobre esa ridícula piña.
- ¿Qué? Yo la primera vez que tocaste aquel tonto silbato.
- Oh, mi amor.