Frases de la película La Bella y la Bestia (2017)
"Una noche una intrusa inesperada llegó al castillo buscando refugiarse de la helada tormenta. Como regalo, le ofreció una rosa al Príncipe. Sintiendo repulsión por su aspecto demacrado el Príncipe le negó la entrada a la mujer. Ella le advirtió que no se deje engañar por las apariencias. Que la belleza está en el interior. Cuando él la echó otra vez la apariencia exterior de la anciana se desvaneció. Para revelar una hermosa hechicera. El Príncipe le rogó que lo perdonara, pero era demasiado tarde. Ella ya había visto que no había amor en su corazón. Como castigo ella lo transformó en una horrible bestia. Y lanzó un poderoso hechizo sobre el castillo y sobre todos sus moradores. Al pasar los años el Príncipe y sus siervos fueron olvidados por todos. Porque la hechicera borró todo recuerdo de ellos de las mentes de las personas que amaban. Pero la rosa que ella le había ofrecido era en verdad una rosa encantada. Si él podía aprender a amar a otra persona y a ganarse su amor antes que el último pétalo cayera el hechizo quedaría sin efecto. Si no, estaría condenado a ser una bestia para siempre."
Al pasar los años cayó en la desesperación y perdió toda esperanza.
Porque, ¿quién podría amar a una bestia?
- Mírala, LeFou. Mi futura esposa. Bella es la chica más hermosa del pueblo. Eso la convierte en lo mejor.
- Pero ella es tan ilustrada. Y tú tan...inclinado al atletismo.
- Lo sé.Las más difíciles de atrapar siempre son las mejores presas. Eso es lo que hace a Bella tan interesante. Ella actúa así solo para ganar mi cariño.
- Papá, ¿piensas que soy rara?
- ¿Rara? ¿Mi hija? ¿Rara? ¿De dónde sacaste eso?
- No lo sé. La gente comenta. Es una aldea pequeña, lo sabes. Con mentes pequeñas también.
- Pero pequeño aquí significa seguro. Incluso en París, conocí a una chica como tú, que estaba tan adelantada a su época. Tan diferente. La gente se burlaba de ella. Hasta el día en que todos se hallaron imitándola.
- Por favor, solo cuéntame una cosa más sobre ella.
- Tu madre era valiente.
- Valiente.- Entonces ¿qué te puedo traer del mercado?
- Una rosa. Como la de la pintura.
- ¡Me la pides todos los años!
- Y todos los años me la traes.
- Entonces te traeré otra. Te doy mi palabra.¿Qué diablos estás haciendo? ¿Enseñándole a leer a otra niña? ¿Con una no es suficiente?
- ¿Te puedo dar un consejo sobre los aldeanos? Nunca confiarán en el cambio que tratas de brindarles.
- Solo quería enseñarle a leer a una niña.
- Los únicos niños de los que tendrías que preocuparte son los tuyos.
- Yo no estoy lista para tener hijos.
- Quizás no conociste al hombre correcto.
- Es una aldea pequeña, Gastón. Conocí a todos.
- Quizás deberías echar otra mirada. Algunos de nosotros cambiamos.
- Gastón, nunca podremos ser felices juntos. Nadie puede cambiar tanto.- Este es nuestro mundo, Bella. Para gente sencilla como nosotros, no hay nada mejor.
- Puedo ser una granjera. Pero no soy sencilla y nunca voy a casarme contigo, Gastón.- ¿Quién eres tú?
- Vine por mi padre.
- Tu padre es un ladrón.
- ¡Mentiroso!
- Robó una rosa.
- Yo le pedí la rosa. Castígame a mí, no a él.
- ¡No! Es para siempre.
- Aparentemente, es lo que pasa aquí cuando tomas una flor.
- ¿Prisión perpetua por una rosa?
- Recibí una condena eterna por una.- Necesito estar un minuto a solas con él. ¿Eres tan cruel que no le permites a una hija despedirse de su padre?
- Lo eterno puede ceder un minuto. Cuando se cierre esta puerta, no volverá a abrirse.
- Tendría que haberte acompañado.
- No. Bella, escúchame. Vive la vida. Y olvídate de mí.
- ¿Que te olvide? Todo lo que soy te lo debo a ti.- Arriesgaría todo por besarte otra vez, Plumette.
- No, mi amor. Ya me quemaste antes.LeFou, eres una buena persona. ¿Cómo es que ninguna chica te atrapó en sus redes?
- ¡Es Bella! Tiene a Bella. Está encerrada en una mazmorra.
- ¿Quién la tiene?
- ¡Una bestia! ¡Una gran, horrible y monstruosa bestia! La vida de mi hija está en peligro. ¿Por qué se ríen? No es una broma. Su castillo está oculto en el bosque. Ya es invierno allí.
- ¿Invierno en junio? Maurice, ¡viejo loco!- Es la idea más ridícula que escuché. ¡Cautivar a la prisionera!
- Pero debe tratar, amo. Cada día que pasa nos hacemos menos humanos.
- Es la hija de un ladrón común. ¿En qué clase de persona la convierte?
- No puede juzgar a la gente por el padre que tiene, ¿no?- Moriré de hambre antes de comer contigo.
- Bueno, como quieras. Vamos, muérete de hambre.- Por favor, perdóname, viejo.
- Esa no es manera de hablarle a mi futuro suegro ¿no?
- ¿Futuro suegro?
- ¡Sí!
- Nunca te casarás con mi hija.- Si te quedaras quieto, no dolería tanto.
- Si no hubieras huido, nada de esto hubiera pasado.
- Si no me hubieras asustado, no hubiera huido.
- No deberías haber estado en el ala oeste.
- ¡Tendrías que aprender a controlar tu temperamento!- Quiero ayudarlos. Debe haber algún modo de romper el maleficio.
- Bueno, hay uno.
- Nada de lo que tenga que preocuparse, mi corderita. Debemos hacernos cargo de nuestros actos.- ¿Qué es? ¿Qué hay ahí?
- Te lo diré cuando seas mayor.- Nunca te agradecí por salvarme la vida.
- Bueno, nunca te agradecí por no dejarme para que me coman los lobos.- LeFou mi más querido acompañante yo tu amigo más antiguo y tu más leal compatriota ¿traté de matar al padre de la única mujer que he amado?
- Es una pregunta complicada en varios aspectos... Pero no. No, él no lo hizo.- A la rosa le quedan cuatro pétalos, o sea que esta noche le podrá decir a ella lo que siente.
- Me siento tonto. Ella nunca me amará.
- No se desanime. Ella es la indicada.
- ¡Desearía que dejes de decir eso! No hay ninguna "indicada".
- Usted siente algo por ella, ¿no? Entonces cortéjela con hermosa música y una romántica luz de velas. Sí, y cuando sea el momento justo...
- ¿Cómo lo sabré?
- Usted sentirá náuseas leves. No se preocupe, amo. Lo hará bien. Solo calme sus nervios y dígale a Bella cómo se siente.
Porque si no lo hace ¡Le prometo que beberá té frío el resto de su vida!- No bailé en años. Casi había olvidado cómo se siente.
- Es tonto, supongo para una criatura como yo esperar que un día podría merecer tu cariño.
- No lo sé.
- ¿En serio? ¿Piensas que podrías ser feliz aquí?
- ¿Alguien que no es libre puede ser feliz?- Amo, tenía mis dudas, pero todo marcha a la perfección. ¡El amor verdadero siempre vence!
- La dejé ir.
- ¿Qué? Amo, ¿cómo pudo hacerlo?
- Tuve que hacerlo.
- Pero, ¿por qué?
- Porque la ama.- No. No teman. Es amable y gentil.
- El monstruo la tiene hechizada. ¡Si no la conociera mejor, diría que ella siente algo por él!
- No es un monstruo, Gastón. ¡Tú lo eres!- Solía estar del lado de Gastón pero ahora no nos llevamos bien.
- Eres demasiado bueno para él.
- Sí.Hola, Bestia. Soy Gastón. Me envió Bella. ¿Estás enamorado de ella? ¿De verdad crees que ella te querría?
- Regresaste.
- Claro que regresé. Jamás te abandonaré otra vez.
- Me temo que es mi turno para irme.
- Ahora estamos juntos. Va a estar todo bien.
- Al menos pude verte. Por última vez.
- ¡No! Por favor, no. Regresa.Te amo.