
Frases de la película Romeo + Julieta
La separación es tan dulce pena que diré “buenas noches” hasta que amanezca.
- Vamos Romeo, hemos de hacerte bailar.
- Yo no, yo no. Vosotros llevais zapatos ligeros de baile; yo tengo el alma en los pies.¿Sabía yo lo que es amor? Ojos jurad que no, porque nunca había visto una belleza así.
- Así quedan mis labios limpios de pecado por los tuyos.
- ¿Entonces ahora mis labios tienen ahora el pecado?
- ¿Pecado de mis labios? Me reprochas con dulzura. Devuélveme mi pecado.Mi único amor nació de mi único odio.
- ¿Vas a dejarme tan insatisfecho?
- ¿Y qué satisfacción quieres esta noche?
- Quisiera el juramento mutuo de amor fiel.
- ¡Te he dado el mio sin que lo pidieras!O tú o yo, o los dos hemos de ir con él.
Soy el juguete de la fortuna.
- ¿Así que te han desterrado de Vernona? Ten paciencia, el mundo es ancho y grande.
- No hay mundo fuera de los muros de Vernona. Así que desterrado es desterrado del mundo, y el exilio del mundo es la muerte. Así que destierro es muerte. Llamando destierro a la muerte me cortas la cabeza con hacha de oro y sonríes al golpe que me asesina.Si profano con mi indigna mano este sagrado sacramento pecado de amor será.
¡Pues que me detengan! ¡Que me maten! Tengo más ganas de quedarme que de irme. ¡Ven muerte! Sé bienvenida; Julieta lo quiere así.
- ¿Cómo está mi señora Julieta? Nada puede estar mal si ella está bien
- Está bien y nada puede estar mal. Su cuerpo duerme en el panteón de los Capuleto, y su alma vive con los ángeles. He visto llevarla allí.- Si te ven aquí te matarán...
- El manto de la noche me esconderá de ellos. Con tal de que me quieras, que me encuentren aquí; más vale que acabe mi vida por su odio que prorrogar la muerte sin tener tu amor.He saltado la tapia con las alas del amor, porque no existe ninguna barrera de piedra para el amor, y como el amor hace lo que puede tus parientes no podrán detenerme.
Mi amor, mi esposa, la muerte que ha libado la miel de tu aliento no ha tenido poder sobre tu belleza. Y no estás vencida.
La mañana nos trae una paz sombría, el sol, dolorido, no muestra su rostro. Salgamos, y hablemos de estas tristezas, unos verán perdón y otros castigo, pues nunca hubo una historia de más dolor que esta de Julieta y su Romeo.