Frases de la película Dune
Los sueños son mensajes de lo profundo. Mi planeta, Arrakis, es muy hermoso cuando el sol desciende. Cuando el viento sopla la arena se puede ver la especia en el aire. Al anochecer, aterrizan los cosechadores de especia. Los extranjeros trabajan contrarreloj para evitar el calor del día. Arrasan nuestras tierras frente a nuestros ojos. Su crueldad contra mi pueblo es todo lo que conozco. Esos extranjeros, los harkonnen llegaron mucho antes de que yo naciera. Al controlar la producción de especia se volvieron obscenamente ricos más ricos que el mismo Emperador. Nuestros guerreros no liberaron Arrakis de los harkonnen. Pero un día, por decreto imperial se fueron. ¿Por qué escogió ese camino el Emperador? ¿Y quiénes serán nuestros nuevos opresores?
Las temperaturas extremas y eventos climáticos traicioneros hacen que la vida fuera de las ciudades de Arrakis sea verdaderamente hostil. Con tormentas de arena tan poderosas que pueden atravesar el metal. Solo las tribus nativas, conocidas como los fremen se han adaptado lo suficiente para sobrevivir. Al preferir habitar las regiones más remotas de Arrakis los fremen comparten el desierto profundo con los gusanos de arena gigantes, llamados Shai Hulud por los fremen. La larga exposición a la especia le ha dado a la tribu sus característicos ojos azules los ojos de Ibad. Se sabe poco más de los fremen fuera de que son peligrosos y poco confiables. Los ataques de los fremen hacen que la extracción de especia sea en extremo arriesgada. Para los fremen, la especia es un alucinógeno sagrado que preserva la vida y otorga enormes beneficios a la salud. Para el imperio, la especia es usada por los navegantes de la Cofradía Espacial para buscar rutas seguras entre las estrellas. Sin la especia, el viaje interestelar es imposible. Lo que la vuelve, por mucho la sustancia más valiosa del universo.
- ¿Puedo confiarte algo?
- Siempre, y te consta.
- Tengo sueños últimamente. Sobre Arrakis y los fremen.
- Bien. ¿Y?
- Y te vi. Con los fremen.
- Sí, los encontraré. Ahí está, es un buen presagio, ¿no?
- Te vi muerto en el suelo. Caído en batalla. Sentí que si hubiera estado ahí estarías vivo.
- Para empezar, no voy a morir.
- Duncan, no me tomas en serio.
- Y por eso quieres ir conmigo. Escucha. Los sueños son buenas historias pero todo lo importante pasa despiertos. Es cuando hacemos las cosas.- Padre, te pido permiso de ir con Duncan Idaho en la misión de expedición a Arrakis mañana. Estudié la lengua fremen, podría ayudar.
- Descartado. Viajarás a Arrakis en unas semanas como todos nosotros.
- Me he entrenado toda la vida, ¿de qué sirve si no...
- Bien lo sabes, Paul. Eres el futuro de la Casa Atreides.
- ¡Y el abuelo toreaba solo por deporte!
- Sí. Y mira cómo le fue.
- Te necesito a mi lado. Cuando lleguemos a Arrakis enfrentaremos un enorme peligro.
- ¿Qué peligro? ¿Los fremen? ¿El desierto?
- Peligro político.- Papá, ¿y si no lo soy?
- ¿Qué cosa?
- El futuro de la Casa Atreides.
- Le dije a mi padre que yo tampoco lo quería. Yo quería ser piloto.
- No me habías dicho eso.
- Tu abuelo decía: "Un gran hombre no busca ser líder recibe el llamado y lo responde". Y si tu respuesta es no...seguirás siendo lo único que yo siempre necesité. Mi hijo. Tuve que buscar mi propia manera. También hallarás la tuya.- Hoy no estoy de humor para esto.
- ¿De humor?
- Sí.
- ¿Qué tiene que ver el humor con esto? Uno pelea cuando la necesidad se presenta tu humor no importa. ¡Pelea!- ¿Tan mal va a estar?
- No has entendido, ¿no? No entiendes la grave naturaleza de lo que nos está pasando. Ochenta años Arrakis le perteneció a la Casa Harkonnen ochenta años como dueños de los campos de especia. ¿Te imaginas la riqueza? Tus ojos, tengo que verlo en tus ojos. Nunca has enfrentado a un harkonnen, yo sí, Paul. Y no son humanos, ¡son brutales! Tienes que estar listo.- Tengo contra tu cuello la Gom Jabbar. Aguja envenenada, muerte instantánea. La prueba es sencilla. Saca la mano de la caja y morirás.
- ¿Qué hay en la caja?
- Dolor.No debo temer. El miedo mata la mente. El miedo es la pequeña muerte que lleva a la devastación. Enfrentaré mi miedo y permitiré que pase a través y sobre mí. Y cuando haya pasado...Veré con mi ojo interior su camino. Y por donde se haya ido el miedo ya no habrá nada. Solo yo permaneceré.
- Como si cerniéramos arena por una malla cernimos a la gente. Si no hubieras podido controlar tus impulsos como un animal no te habría dejado vivir. Heredas demasiado poder.
- ¿Porque soy el hijo del duque?
- Por ser hijo de Jessica. Tienes más de un legado, niño.- ¿Tenía que haber ido tan lejos?
- Tú decidiste enseñarle la manera desafiaste nuestra regla. Porta nuestro poder tenía que poner a prueba sus límites. Demasiado potencial desperdiciado en un hombre. Se te dijo que engendraras solo hijas pero por vanidad creíste que podrías dar a luz al Kwisatz Haderach.
- ¿Y me equivoqué?
. Fue pura suerte que no acabara muerto. Si es el elegido, le falta aprender mucho apenas despierta su visión y ahora lo lanzan al fuego. Pero nuestros planes se miden en siglos y hay otros prospectos si no cumple lo que se espera de él.- ¿A qué se refiere con si soy el elegido?
- La oíste. Las Bene Gesserit somos compañeras poderosas de las Grandes Casas. Pero hacemos más que eso.
- Sí. Dirigen la política del imperio desde las sombras. Lo sé.
- Desde hace miles de años hemos cruzado cuidadosamente las líneas sanguíneas para procrear...
- Al Elegido.
- Una mente lo bastante poderosa para ser el puente entre el espacio y el tiempo. Pasado y futuro. Que nos pueda guiar hacia un mejor futuro. Creemos que ya está muy cerca. Muchas creemos que ya está aquí.- Estaban señalándonos. ¿Qué decían?
- Lisan al-Gaib, "la voz del mundo exterior". Es "mesías" en su lengua.
- O sea que las Bene Gesserit hicieron su trabajo aquí. ¿Implantando supersticiones? Preparando el camino, Paul. Estas personas llevan siglos esperando a su Lisan al-Gaib. Cuando te ven, ven las señales.
- Solo ven lo que les dijeron que vieran.- No sabía que hubiera palmeras datileras aquí.
- No, no son indígenas. No sobrevivirían sin mí. Cada una de ellas bebe todos los días el equivalente a cinco hombres.
- Veinte palmeras. Cien vidas. ¿Y si las quitamos y ahorramos agua?
- No, no, no, no. Son sagradas. Un viejo sueño.El organismo más grande y más peligroso de Arrakis es el gusano de arena. Capaz de crecer hasta 400 metros de longitud. Para evitar hacer ruidos rítmicos lo que atrae a los gusanos de arena los fremen cruzan espacios desérticos usando "El andar de la arena" un movimiento parecido a un baile de ritmo irregular que simula los sonidos naturales del desierto. La escasa vida vegetal que existe en Arrakis se debe a los fremen que han cultivado plantas terrícolas de raíces profundas, como el saguaro hierba del burro, verbena de arena y la plata de incienso. El árbol de pastores tiene las raíces más profundas que se hayan documentado con más de 137 metros.
Estas plantas se aferran a la vida en un paisaje seco y carente de nutrientes.- Si el hijo del duque vive...
- Ningún Atreides va a vivir.
- Mi señor, le dio su palabra a la bruja. Y ella ve demasiado. Dije que no los lastimaré y no lo haré. Pero Arrakis es Arrakis y el desierto aniquila a los débiles.- ¡Duncan!
- ¡Mi muchacho!
- Juraría que estás más alto.
- Y tú hueles peor.
- Viví cuatro semanas con los fremen oculto en el desierto, en una comunidad llamada Sietch. El líder de esa Sietch vino a conocerlo, señor. ¿Una Sietch? ¿Cómo la ocultan? Bajo tierra. Arrakis está lleno de cavernas.
- ¿Y de qué tamaño era?
- Para diez mil personas. Y hay cientos de Sietches. Millones de fremen.
- Tenías razón. Los harkonnen estimaban 50 000 en todo el planeta.
- Los fremen me vieron buscarlos por días, jamás los vi. Al final enviaron un guerrero a matarme.
- Y se los juro jamás estuve tan cerca de la muerte. No hay mejores guerreros en el imperio. Pelean como demonios. Poder del desierto.- Gracias, Stilgar por el obsequio del agua de tu cuerpo. Lo aceptamos en el ánimo en el que fue dado. Gracias por venir. Creo que su pueblo y el mío tienen mucho que ofrecerse el uno al otro.
- Son de otro mundo, vienen por la especia se la llevan y no dan nada a cambio.
- Es cierto. Sé que han sufrido a manos de los harkonnen. Dígame lo que quiere. Si está en mi poder, se los daré sin pedir nada a cambio.
- Le pido esto: No busquen nuestras Sietches no invadan nuestras tierras. El desierto era nuestro mucho antes de que vinieran. Vayan, saquen su especia, pero cuando la tengan vuelvan a este lado del muro escudo y déjenle el desierto a los fremen.- Ten, te traje esto. Es una parabrújula las lunas tienen un campo magnético así que una brújula de aguja no apunta al norte. Se necesita un aparato astuto para resolverlo.
- ¿Los fremen las hacen?
- Destiltrajes, compactadores de arena y muchas cosas ingeniosas.
- ¿Qué es un compactador de arena?
- El compactador de arena.
- No puede ser, te volviste nativo. Los admiras. Es cierto. Son fieros, pero leales. En sintonía con el desierto, son parte de él. Y es parte de ellos.
- Tienes que verlo. Es muy hermoso.- Tienes que saber algo importante de Paul.
- No. Creo que no quiero saberlo. Desde que lo llevaste ante tu Reverenda Madre, no ha sido el mismo. Está distraído. Jessica, me diste un hijo y desde el momento que nació, yo jamás te cuestioné, confié ciegamente en ti. Aunque te muevas en las sombras. Ahora te hago una sola pregunta. Si llega a pasar algo ¿protegerás a nuestro hijo?
- Con mi vida.
- No te pregunto como madre, sino como Bene Gesserit. ¿Protegerás a Paul?
- ¿Por qué estás pensando eso? Leto, tú no eres así.
- Creí que tendríamos más tiempo.Llevamos cientos de años pagando sangre por sangre. Pero se acabó. Tu hijo está muerto, tu concubina está muerta. Esta noche cayó la Casa Atreides. Tu linaje muere para siempre.
Bebe agua. Es agua reciclada de la tienda. Sudor y lágrimas.
El misterio de la vida no es un problema a resolver. Es una realidad que hay que vivir. Un proceso que no se puede entender si le pones fin. Debemos avanzar con el flujo del proceso. Hay que unirnos a él. Debemos fluir con él.
- Paul Atreides debe morir para que el Kwisatz Haderach surja. No tengas miedo. No te resistas. Cuando quitas una vida, pierdes la tuya.
- No creo que seas el Lisan al-Gaib. Pero quiero que mueras con honor. Mi tía abuela me obsequió este Crys. Está hecho de un diente de Shai Hulud el gusano de arena. Será un gran honor para ti morir usándolo.El Emperador nos envió a este planeta. Y mi padre vino no por la especia no por las riquezas vino por la fuerza de tu gente. Mi camino conduce al desierto.